Todas las personas son conscientes de la importancia de proteger su piel con un buen protector solar. Podríamos decir que actualmente nadie sigue con el pensamiento de que no es necesario su uso.
Aunque todos conozcamos los beneficios de usar este producto, lo cierto es que muchas veces cometemos errores en su aplicación que acaban inhibiendo la acción protectora sobre nuestra piel, por lo que está buena acción se convierte en algo perjudicial.
Para evitar estos errores hay que seguir las pautas que nos dan los dermatólogos y dejar de lado nuestras creencias personales.
Hoy vamos a contarte cuáles son los errores más comunes que solemos cometer con el protector solar para que los evites.
No aplicar la loción solar en el momento adecuado
Seguramente, cuando te has preparado para un día de playa o piscina no te has aplicado la loción hasta que no has llegado al lugar concreto ¿verdad?
Este es un fallo muy común que comete mucha gente, el problema radica en que el protector solar debe aplicarse en casa antes de salir, digamos que con una media hora de antelación es suficiente.
El motivo es sencillo, el producto necesita tiempo para que nuestra piel lo absorba correctamente y cree la barrera necesaria contra los rayos dañinos.
Por lo tanto, hay que evitar siempre aplicar la crema solar cuando estamos ya en el lugar de exposición solar.
Usar un protector adecuado para cada zona
Cuando vamos a comprar un producto de estas características siempre acudimos a los que están destinados para el cuerpo, dejando de lado la cara.
Es cierto que muchas personas aplican estos protectores de cuerpo en la cara pensando que de esta forma protegen su piel, aunque sea cierto, es mejor poner una loción específica para nuestra tez, ya que la piel de esta zona es más fina y sensible.
Intenta siempre tener a mano una loción para el cuerpo y otra para la cara, además es recomendable usar bálsamos labiales que tengan protección solar ya que nuestros labios también son vulnerables a la exposición.
Aplica abundante protector y en todas las zonas
Un fallo muy habitual es aplicar muy poca cantidad de loción solar, dando como resultado que muchas zonas de nuestro cuerpo no tengan la protección que buscamos.
Con esto no queremos decir que te apliques el bote entero de crema solar, nada más lejos de la realidad. En este punto debes ir por zonas y aplicar la cantidad suficiente para poder extenderla en toda el área concreta fácilmente.
Otro punto a tener en cuenta son las zonas que suelen quedar en el olvido, nos referimos a los pies, la nuca, orejas e incluso la parte interior de los brazos.
Muchas veces pensamos que no es necesario aplicar producto ahí, pero son zonas muy expuestas que tienden a quemarse con mucha facilidad.
Utilizar productos de otros años
Los botes de crema solar suelen ser muchas veces de tamaños bastante grandes, por lo que no es nada complicado acabar el verano con medio bote de loción, la cual dejamos para el siguiente verano.
Aquí hay que tener especial cuidado, ya que las cremas solares tienen fecha de caducidad como el resto de productos cosméticos, por lo general suele ser de 12 meses.
Esto quiere decir que este producto no nos va a servir para protegernos del sol el verano siguiente.
Para evitar esto debemos tener la precaución de mirar la caducidad de la crema una vez ha finalizado el verano, en caso de no ser superior a los 12 meses lo recomendable es tirarla en ese momento, evitando así su uso en el próximo verano.
En caso de vivir en una zona muy soleada durante todo el año, en la cual visites muy a menudo la playa todos los meses o realizas deporte al aire libre por la montaña, lo que puedes hacer es anotar en el mismo envase de la loción el mes y año en el que abriste el bote, para evitar su uso una vez haya expirado.
No aplicar crema más veces durante el día
Las cremas solares tienen un efecto protector estimado, el cual podemos deducir a partir del FPS. Para que nos entendamos, un FPS de 15 nos estará protegiendo unos 150 minutos antes de empezar a quemarnos aproximadamente.
Cómo puedes ver, aunque el FPS sea alto no quiere decir que nos vaya a proteger indefinidamente, es cierto que a mayor FPS más horas estaremos protegidos, pero eso no significa que debamos olvidarnos por completo de su re-aplicación.
Para evitar quedarnos sin protección los dermatólogos recomiendan volver a aplicar la crema siempre que nos demos un baño, en caso de no bañarnos se debe volver a aplicar pasadas unas dos o tres horas pero nunca más tiempo.
Aplicar loción solar sólo cuando nos da el sol
El último error que vamos a mencionar puede que sea de los más recurrentes junto con el de no aplicar el protector en el momento adecuado, nos referimos a la acción clásica de no ponernos loción solar si no nos está dando el sol o si el día está nublado.
Este error es de los más graves, ya que los expertos nos aseguran que en un día nublado los rayos ultravioleta siguen estando presentes y, por consiguiente, incidiendo en nuestra piel.
Lo mismo pasa cuando estamos a la sombra sin protector pensando que estamos protegidos.
A parte de evitar estos errores que cometemos con el protector solar, es importante elegir uno que sea adecuado para nuestra piel, con los filtros adecuados, evitando siempre compuestos dañinos como es el octocrileno y que no sean comodogénicos.
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