¿Cuántas veces te lavas la cara al día? Hay personas que solo se lavan el rostro al despertar, pero esto no es suficiente. Lo necesario es hacerlo dos veces al día. Por eso, vamos a hablar sobre: ¿Por qué es importante lavarse la cara dos veces al día?
También es importante tener en cuenta que hay personas que no se lavan la cara todos los días, y les basta con hacerlo mientras se duchan. Esto, por supuesto, es totalmente insuficiente y por eso, queremos explicarte la importancia que tiene lavarse la cara dos veces al día.
Para que el rostro esté limpio es fundamental ser riguroso con la limpieza, no limpiar cuando nos acordemos, si no más bien siguiendo unas rutinas estrictas que deben ser constantes y además, todos los días, dos veces.
Son muchos los factores externos que pueden perjudicar la salud de nuestro rostro, por este motivo, es aún más importante limpiar el rostro con rigurosidad.
La exposición al sol, los radicales libres, la contaminación, el maquillaje… son muchos los factores que pueden hacer daño a tu dermis y sobre todo, hacer que se acumulen impurezas.
Cuando se acumulan estas impurezas y no se retiran, pueden hacer que tengas problemas dérmicos como por ejemplo, inflamaciones, rojeces, infecciones dérmicas, granitos, acné, puntos negros, ojeras, bolsas, flacidez, arrugas o líneas de expresión prematuras.
Son muchas las consecuencias negativas de no limpiarse el rostro y probablemente no es algo que te gustaría padecer ni ahora ni en el futuro. Por eso, la limpieza diaria no es una opción, es toda una obligación.
Escoger un buen producto para tu limpieza facial dependerá de tu tipo de dermis y de las necesidades que requiera tu piel. Un producto que siempre va bien, por ejemplo, es el agua micelar.
Este producto se adapta muy bien a todo tipo de dermis y además de hidratar, en muchos casos, también tonifica, regenera, limpia, desmaquilla y alivia las dermis más delicadas. Por lo que, aunque tengas otros productos de limpieza, el agua micelar no te debe faltar.
Lavarse dos veces al día la cara
Cuando no te lavas el rostro las veces necesarias puedes tener muchas consecuencias negativas como te hemos apuntado más arriba. En cambio, hacerlo, y no solo con agua y jabón, si no con los productos adecuados, te ayuda en muchos aspectos.
Además de tener el rostro limpio, los poros impecables, el rostro más liso y firme, sin impurezas ni suciedad, tendrás un cutis bien hidratado y nutrido y lo que es mejor, protegido y con menos arrugas o llenas de expresión.
Porque todo lo que te aporta una buena limpieza facial te permite retrasar los signos del envejecimiento, por lo que tendrás un rostro mucho más suave y saludable. Bien cuidado
Es fundamental que lo hagas al despertar y también por la noche, aunque estés cansado/a de todo el día. Además, si sueles usar maquillaje aún es más importante tener esto en cuenta, puesto que si no limpias tu rostro antes de ir a dormir no respirará bien la piel.
Si tu dermis no respira, los poros se taponan y te pueden salir problemas dérmicos como granos, espinillas, rojeces e incluso que se te irriten zonas tan importantes para ti, como tus ojos.
Nadie quiere tener infecciones oculares o dérmicas, pero si no limpias bien tu rostro es probable que te ocurra antes de lo que te imaginas.
Por supuesto, además de lo comentado más arriba, hay otro aspecto fundamental que no se puede pasar por alto: una buena higiene. Tener una buena higiene es fundamental y necesario para la salud dérmica.
Todas las personas tenemos una capa de sebo natural en la dermis que nos protege de las agresiones externas. Cuando hay demasiado sebo ese conoce como piel grasa y si se tiene demasiado poca, piel seca.
En ambos casos es bastante molesto porque en la piel seca la dermis es vulnerable a problemas dérmicos y en la grasa también. Cada una con sus diferencias pero en ambos casos, molesto. Por eso es tan importante equilibrar la piel y el sebo.
Lavar más de dos veces el rostro al día es contraproducente porque estarías eliminando la capa natural protectora dérmica, y por lo tanto, también dejarías tu dermis expuesta. Pero en cualquier caso, hacerlo dos veces al día mantendrá el equilibrio que necesitas.
Lee más: Cómo hacer un limpiador facial casero
Por qué la limpieza facial dos veces es tan importante
Para que puedas entender por qué la limpieza facial resulta tan importante en todos los casos, vamos a exponerte una serie de puntos que debes recordar. Cada vez que te dé pereza lavarte el rostro, recuerda cada uno de estos puntos. De esta manera conseguirás ser más constante.
No pierdas detalle sobre por qué al limpia facial dos veces al día es importante:
- Tendrás una piel saludable, firme y lisa
- No tendrás que sufrir la flacidez dérmica
- Activarás la circulación sanguínea
- Tendrás menos ojeras y bolsas
- Mantendrás una buena higiene evitando infecciones
- Tendrás los poros limpios y sin que se obstruyan
- Tendrás la dermis preparada para los tratamientos dérmicos con tus cosméticos preferidos y serán más efectivos
- Mantendrás un cutis regenerado y rejuvenecido
- Tendrás el sebo del rostro bien equilibrado
- Tendrás un rostro con buena hidratación y con mayor elasticidad
Será la mañana y la noche los momentos clave para limpiar tu rostro. Son dos momentos clave y debes entender por qué son tan importantes hacerlo tanto por la mañana como por la noche.
Por la mañana es importante porque tendrás la dermis más receptiva y limpiarás todas las impurezas acumuladas en el rostro durante la noche, como el sebo. Estarás preparando tu cutis para el resto del día.
Por la noche también tienes que lavar tu cutis adecuadamente para eliminar todas las impurezas acumuladas durante el día, así como los restos de maquillaje. De esta manera tu dermis podrá descansar y regenerarse adecuadamente.
Cuidado con los errores
Sin la información adecuada, es normal que puedas cometer errores de limpieza cada día, por eso debes tener la información adecuada para que eso no ocurra. Algunos de los errores que no puedes pasar por alto son los siguientes:
- Usar agua demasiado fría o demasiado caliente. El agua debe estar tibia y que puedas soportar la temperatura en tu dermis, debe ser una temperatura agradable para ti. Los poros se limpiarán mejor y no tendrás un cutis resentido por los cambios bruscos.
- Limpiar el rostro con prisas. Si limpias tu cara con demasiadas prisas, es más que probable que no lo hagas bien del todo. En este sentido, es fundamental que te tomes tu tiempo, como dice el refrán: “vísteme despacio que tengo prisa”.
- Prescindir del tónico facial. Recuerda que después de la limpieza facial no puede faltar el tónico. Es fundamental para que se cierren los poros y para sellar del todo la limpieza facial. Solo de esta manera tu cara estará totalmente preparada para los tratamientos posteriores.
- Utilizar productos que no te van bien. No es buena idea que no utilices productos adecuados para ti porque a la larga pueden causarte serios problemas de salud. En este sentido, debes fijarte que siempre tengan ingredientes naturales y que no contengan químicos ni toxinas que puedan dañarte de alguna manera.
- Usar toallitas desmaquillantes. En ocasiones, por las prisas puede que utilices toallitas desmaquillantes, que lo hagas de manera puntual no pasa nada. Pero si utilizas estos productos de manera habitual tu piel se resentirá y tendrás problemas dérmicos. Además, pueden extender la suciedad por el resto de tu cara y complicar aún más tu salud de la piel.
- Pasarte de limpieza. Igual que no limpiar las veces adecuadas está mal, pasarte de limpieza tampoco es correcto. Si te limpias de más tendrás consecuencias poco deseadas ya que eliminarás la capa que protege tu dermis y tendrás la piel vulnerable a infecciones.
- No fijarte en los ingredientes. Cuando utilizas productos para la limpieza facial no todo vale, por lo que es fundamental que te fijes en la fórmula de cada uno de los productos. Tienen que ser cosméticos con ingredientes naturales y de calidad, que no contengan parabenos, ni siliconas ni ninguna sustancia que pueda ser dañina para ti.
Cuando hablamos de lavar el rostro dos veces al día estamos haciendo referencia a lavar el rostro correctamente tanto por la mañana como por la noche. En estas rutinas puedes implementar la doble limpieza facial, que consiste en lavar tu rostro con dos productos diferentes.
Pero lo que realmente importa es lavar el cutis y tener unas rutinas de cuidado y limpieza facial correctas. Para ello no debes olvidar los siguientes pasos:
- Limpieza facial (con agua micelar y otro producto limpiador oleoso para la doble limpieza. Todos los días, mañana y noche)
- Mascarilla (una o dos veces a la semana)
- Exfoliación (una o dos veces a la semana y que no sean los mismos días que la mascarilla)
- Tónico facial (todos los días, mañana y noche)
- Contorno de ojos (todos los días, mañana y noche)
- Sérum (todos los días, mañana y noche)
- Crema hidratante (todos los días, mañana y noche)
- Protector solar SPF 50+ (durante el día)
Ahora que ya sabes por qué es importante lavarse la cara dos veces al día… ¡no tienes excusa para no hacerlo!